Se preocupa de solucionar los problemas generados principalmente por las anomalías dentomaxilares conocidas habitualmente como “dientes apiñados”. Se encarga de todo estudio, prevención, diagnóstico y tratamiento de las anomalías de forma, posición, relación y función de las estructuras dentomaxilofaciales. Los tratamientos pueden ser con aparatos fijos o removibles según el grado de alteración, y están indicados tanto en niños como en adultos.